Alcanza los 15.772 puntos de recarga públicos, lejos de los 45.000 marcados como objetivo para este año

España se mantiene a la cola de Europa en lo que respecta al desarrollo de la electromovilidad, alejándose de los países de su entorno europeo, tal y como señala el indicador global de electromovilidad (que valora la penetración de los vehículos electrificados y la instalación de infraestructuras de recarga de acceso público).

Durante el segundo trimestre de 2022 se ha producido una ralentización en el desarrollo tras el moderado crecimiento que se experimentó durante el primer trimestre. En este sentido, se logró un crecimiento de 0,9 puntos respecto al periodo anterior, alcanzando un total de 14,2 puntos sobre 100 en el Barómetro de electromovilidad de ANFAC. Continúa aumentando la brecha nacional con respecto a la media europea, que ya se distancia en 15 puntos, la cual se sitúa en 29,1 puntos.

Tal y como señala el indicador global de electromovilidad, el crecimiento de España es menor en comparación con la media europea, que sube 1,1 puntos. La posición del ranking se mantiene estable para todos los países analizados, aunque aumentando las diferencias entre los países líderes y aquellos en las últimas posiciones. Noruega continúa en el primer puesto, seguido de Países Bajos y Alemania.